¿Qué haces cuando quieres bajar de peso? Vas en busca de una dieta “efectiva” y seguramente te apuntas al gimnasio, pero hay un pequeño problema. No todas las dietas funcionan correctamente muchas traen consigo el temido efecto rebote. El efecto rebote es aquella reacción opuesta a lo que buscábamos. Es decir, si buscábamos bajar de peso pues terminaremos tarde o temprano más gorditos. La dieta de la zona va en contra de todo esto, porque en teoría no es una “dieta”, es un concepto nutricional, una forma de alimentarnos.
Para bajar de peso es necesario hacer menos énfasis y más en nuestro estilo de vida saludable. No limitar nuestra alimentación si no, adecuarla, optimizarla para hacer de los procesos hormonales de nuestro cuerpo más eficientes y por consiguiente reducir tallas.
Incorporar ejercicios físicos a nuestro día a día también colaborara en esto. Entre 15min y 20min de ejercicio cardiovascular o sesiones de pesas, cinco días a la semana tendrá un efecto positivo en nuestro cuerpo.
¿Cómo funciona la dieta de la zona?
Este concepto nutricional consiste en dividir nuestros aportes calóricos. Combinar proteínas, grasas y carbohidratos en una proporción 30-30-40 en cada comida. Actualmente existen dos tipos de procedimiento denominados métodos de los bloques y método visual.
Método de los bloques: Reside fundamentalmente en realizar los cálculos nutricionales correspondientes. Haciendo este cómputo nutricional podremos estar más cerca de la proporción correspondiente a la dieta de la zona. Es decir, un bloque de proteína 30%, un bloque de grasas 30%, un bloque de hidratos de carbono 40% corresponden a un bloque. Es indispensable conocer el aporte nutricional de cada alimento.
Método visual: Se fundamenta en dividir el plato en tres partes iguales 3/3. Colocaremos nuestra porción correspondiente a nuestro aporte magro de proteínas en una medida de 1/3. Colocaremos nuestro aporte calórico correspondiente a los hidratos de carbono en una medida de 2/3 para completar la división de nuestro plato 3/3. Por ultimo añadimos la grasa correspondiente (mono-insaturada) para aliñar nuestro plato, puede provenir del aceite de oliva.
Para poder determinar cuánto y con cuanta frecuencia comemos cada día, dependerá de nuestra actividad física. Una persona activa, que trabaja y hace deporte reclamara un mayor aporte calórico que una persona promedio. Entre un hombre y una mujer el aporte calórico correspondiente varia significativamente.
Pueden influir muchos aspectos que demos tener en cuenta a la hora del cálculo nutricional. Sexo, nivel de actividad física, grasa corporal, masa muscular entre otros. Si no tienes idea del cómputo de los aportes calóricos, no te preocupes hay paginas diseñas exclusivamente para esto.
Recomendaciones para la dieta de la zona
Realizar cinco comidas diarias estructuradas en: Tres comidas principales desayuno, almuerzo y cena; Dos comidas intermedias “meriendas” entre el desayuno y el almuerzo, entre el almuerzo y la cena.
Realizar el desayuno inmediatamente después de habernos despertados.
No dejar pasar más de cuatro horas entre cada comida.
Beber mucha agua al día y, por último, pero no menos importante comer comidas con un aporte nutricional de gran cálida de esta forma la dieta de la zona nos ayudara por mucho a bajar de peso.